¿Tienes capacidad tienes de ser un líder emocional?, ¿Eres capaz de sacar el 2000 % de rendimiento de tus empleados?, ¿podrías hacer vibrar a un equipo, para ponerlo en su elemento en las condiciones más adversas?

Ti tienes una o varias respuestas negativas, te tengo que dar una muy buena noticia, estas respuestas se pueden hacer un sí rotundo, con practica alineamiento y una buena dosis de herramientas, que vamos a sintetizar en este artículo.

No quería desaprovechar este artículo, con una noticia de hace unos meses del CEO de Lenovo reparte su bonus entre los empleados, tres millones de Euros para sus empleados.

 

Creo que es el momento justo para explicar cual es nuestro papel en el cambio educativo que proponemos, desde el punto de vista de posicionamiento, nosotros tenemos un método totalmente universal y atemporal, que podría mutar en el sistema educativo, a todo nivel y aportar valor, así como ser un revulsivo para la competitividad futura de nuestra empresas. Vamos aportar nuestra experiencia en los campos de las emociones, de la creatividad, de la toma de decisiones, en la automotivación, campos hasta ahora inexplorados en el sistema educativo. Creo que a mayores de aportar, puede ser interesante demostrar la universalidad aplicándolo a las etapas más tempranas de la educación.

Como bien sabéis tenemos un sistema educativo que tiene su base o su pilar fundamental en la parte cognoscitiva, dejando los otros pilares del conocimiento, como satélites o para el desarrollo foráneo. De la que el test de inteligencia, (IQ siglas en inglés), es el verdadero caballo de batalla, donde si no eres rápido o tienes un mal día o simplemente el día que te lo hacen estás con fiebre, simplemente determina que eres poco inteligente y que tienes pocas posibilidades en la vida. Quien se lo diaria al zaparero de mi pueblo que es la persona más feliz y sin haber hecho el IQ, igual podía ser astronauta y montar una zapatería en la luna, "ojo lo de zapatero no tiene segundas".

Nuestro primer impulso, ya que queremos ayudar, es ir a hablar con el ministro de educación, evidentemente el está para otras cosas, pero nos recibe una persona de su equipo, creo que no hace falta hablar demasiado, por que mantenemos una enorme discreción. Pero era momento de explicar que un ministro no tiene competencias de cambiar o redireccionar un sistema educativo obsoleto, creado en la revolución industrial. Sino que las competencias las tienen las autonomías. Tal vez el cáncer sean las autonomías, pero igual habría que flexibilizar el modelo, adaptarlas a las demandas del estado, etc.

Parece que con los momentos en los que estamos, deberíamos estar cuestionando todo, pero no parece que si fuera por unos cuantos, estaríamos escribiendo en mármol las bondades de nuestro sistema educacional, como hombres de las cavernas modernizados por estar dejando atrás culturas ancestrales.

El sistema educativo, en momentos de crisis es cuando más es necesario valorarlo, cuestionarlo y sobre todo reformarlo no en papel, sino que demuestre que es digno de hacer un estudio de porque todo el talento se aglutina en nuestro país.

La diferencia entre una comunicación perfecta y  una que nunca se te olvidará en la vida son las emociones, en ella tenemos implícitos sentimientos, pasión, os aseguro que todo en la vida gira por la pasión. Si haces las cosas no solo bien sino con pasión te estás asegurando un hueco en cualquier proyecto que se precie.

Comunicar es trasmitir información desde un emisor a un receptor, existen canales y canales, lo único que puede hacer que esa comunicación deje de ser un mero flujo de información, y que se transforme en un mensaje inolvidable, lleno de sentido y que te marca el resto de la vida, la única forma en la que puedes hacer las cosas diferentes es haciendo cambios y realmente llenándolas de cosas diferentes, emotivas, y que transforme una simple ponencia en algo irrepetible.

Pasar de ser un simple comunicado a un auténtico torbellino de sensaciones, emociones, kinestesia, transformando lo mundano en algo mágico. Ese es el verdadero exponente de un mensaje y por ende de una comunicación.

 

Los medios de comunicación han creado una imagen, un estereotipo, en realidad de lo que nuestra sociedad contemporánea entiende por emprendedor. Así, a los actuales estudiantes, cuando se les pregunta por este concepto, siempre acuden a los tópicos: inventar algo en el garage de la casa de tus padres, visionarios, triunfadores, millonarios, pioneros de Internet o algo relacionado con las nuevas tecnologías… etc. En muchos casos es así, pero en otros….